Se lleva el triunfo delante de Reavie, el golfista que le negó la victoria en 2019.
Keegan Bradley encontró la paz en Crowmell (Connecticut), en el Travelers, el torneo que se le negó en 2019 con el mismo viejo conocido a su lado, Chez Reavie, el golfista ganador en aquella ocasión y que terminó este domingo en cuarta posición, a cuatro golpes del de Woodstock.
Fue tanta la ventaja cobrada en los primeros 12 hoyos, donde Bradley fabricó cinco birdies y amplió su ventaja de forma sideral, que su desastroso final, tres bogeys en los últimos seis hoyos, incluyendo una bola al agua, no le impidió ganar por tres golpes de ventaja.
Con la victoria, el estadounidense de 37 años suma su sexto título profesional, el segundo del año tras el Zozo Championship y se perfila como uno de los golfistas que podrían ser reclutados para la Ryder Cup de este otoño, competición que jugó en 2012 y 2014, cuando acababa de ganar el PGA de 2011 y se perfilaba como una de las grandes sensaciones del golf estadounidense.